Hoy en dia todo el mundo parece estar muy seguro, valora las cosas de manera muy personal como positivas y el resto que mal lo hacen. Aplican una lógica que yo no entiendo:
Hay padres que elogian a sus hijos por lo listos que son, ya que, en vez de pagar una copa a 5,7, o 10€, sus hijos son tan listos que se beben 10 copas de alcohol al mismo precio que una. "que hijo mas listo y ahorrativo tengo". Ese padre no sabe ver que el problema no es el precio de una copa en un bar, sino que tu hijo o hija esta bebiendo hasta perder el conocimiento en un descampado o plaza rodeado de basura y orines. Vemos como normal lo que no lo es.
Algunos dicen eso de "es que somos personas" que limpien esto un poco. Lo dicen los mismos que ensucian, a las autoridades, que les limpien lo que ellos ensucian. ¿eso es normal?.
Ej-2: Un ayuntamiento permite y promueve una fiesta pastillera. Donde todos saben quienes venden y que venden, al igual que saben los consumos y consecuencias que acarrean este tipo de fiestas. El ayuntamiento da los permisos, le pone guarda de seguridad, lo anuncia en publicidad, etc. Fiesta en la que existen peleas, consumos de sustancias ilegales, entrada de menores, comas etílicos...... Unas semanas mas tarde, el mismo concejal que anunciaba la fiesta, anuncia que están realizando acciones de prevención de las drogas en los jóvenes (con dos cojones). ¿Una política normal, lógica y coherente?.
Ej-3: Hay padres que alardean de que su hijo es un "Don Juan", se liga a todas las mujeres que pilla, y las enreda con cualquier pretexto, hasta obtener sus favores. Diciendo el padre "que pedazo de hijo tengo". Y cuando hablan de la hija de fulanito dicen "que pedazo de puta" por una niña que liga lo que puede, y mantiene relaciones sexuales. Los dos hijos hacen lo mismo, pero el mio es bueno y el tuyo no. Lógica de padre o madre. Mi hijo/a es bueno y tu hijo/a tuyo "que pedazo de pu...".
Lo mio bueno Lo tuyo malo
Mi hijo un ángel Tu hijo un demonio
Querido hijo:
Cuando yo era adolescente deseaba, igual que tu, que mi padre fuera mi mejor amigo. Sin embargo, no fue hasta que me llegó el turno de ser padre, cuando comprendí la razón por la cual mi deseo jamás se cumpliría. Y no es que mi padre no haya querido ser mi mejor amigo, sino que él entendió que un verdadero padre jamás podrá ser el mejor amigo.
Existen varias razones, pero la más importante es que el papel de un amigo es totalmente diferente al de un padre. Un amigo está a tu mismo nivel pues tanto él como tú tienen varias cosas en común tales como la edad, la forma de pensar, los gustos, las actividades y las diversiones.
El papel de un padre es mucho más difícil pero sobretodo más importante para ti. Un padre debe proveer a su hijo amor constante, sustento económico suficiente y también una educación académica apropiada hasta donde sus posibilidades le permitan. También debe protegerlo física y emocionalmente, darle apoyo y estímulo emocional, guiarlo y darle siempre buen ejemplo.
Pero principalmente, inculcarle valores éticos y morales que lo conviertan en un hombre responsable, autosuficiente y de una gran calidad humana.
La influencia de un amigo es completamente diferente a la de un padre y por lo mismo, un padre que trata de ser el mejor amigo no puede ser un verdadero padre. Amigos podrás tener muchos pero padre, sólo uno.
El ser amigo es voluntario, es una opción. El ser padre es un privilegio. Las únicas características parecidas entre un padre y un verdadero amigo son compartir contigo actividades propias de tu edad, ofrecerte apoyo emocional, desalentar tus debilidades de carácter y alentar tu superación.
Un amigo no tiene ningún derecho de autoridad sobre ti sin embargo, como padre, yo sí lo tengo. Y no porque me cause satisfacción imponer mi autoridad, sino porque es mi deber disciplinarte.
El establecer reglas y hacer que se respeten, es un derecho que sólo nos corresponde a los padres y que se adquiere al asumir la responsabilidad completa de un hijo. La autoridad y la responsabilidad van juntas. No se puede exigir libertad o autoridad sin tener obligaciones. Mientras vivas con tus padres y dependas económicamente de ellos para casa, comida, ropa, escuela, diversiones etc., deberás obedecer las reglas que hemos establecido.
Mi compromiso como padre incluye darte lo que necesitas y no necesariamente lo que quieras.
Como padre, mi principal objetivo no es el de ganar votos de popularidad sino el ser un padre responsable y buscar antes que nada, tu formación moral y tu bienestar. Si desempeño bien mi papel, con el tiempo te darás cuenta que estos principios que trato de inculcarte serán lo mejor que como padre pueda ofrecerte. Jamás olvides que a pesar de todo siempre te querré y que estaré a tu lado para celebrar tus triunfos y estaré dispuesto a ayudarte a superar tus fracasos.
Algún día comprenderás plenamente la gran importancia y el profundo significado de esta carta. Ese día comenzará una identificación muy grande y significativa entre tú y yo. Cuando llegue ese día, jamás lo olvidarás pues será uno de los más felices de tu vida. En ese día tan especial, recibirás también una hermosa bendición y una responsabilidad extraordinaria. Será el día cuando tengas en tus brazos a tu primer hijo. A partir de ese momento tu también comprenderás que más importante y trascendental que ser un amigo para tu hijo, es ser verdadero padre.
El gran problema aparece si realizamos el test y descubrimos que nuestro hijo consume drogas. ¿Como actuamos después?¿Que le decimos?¿donde vamos?etc.
Dialogar de manera adecuada, para conocer: El tipo de sustancia consumida, la dosis y la frecuencia, el nivel de información que tiene el chico sobre ese consumo y esa droga y otras, grado de conciencia.
Valorar la situacion:
grado de riesgo/abuso, analizar los recursos existentes, Decidir que hacer, esta decisión se puede hacer con la ayuda de un profesional sobre esos temas( no con el cura, ni con un cuñado "porrero")
Esconder la cabeza y /o hacerse el que no sabe nada no suele mejorar la situación. Culpabilizar a otros tampoco suele ser una solución adecuada.
Innumerables son los padres que ocultan el problema por el "que dirán", y comienzan a peregrinar por sitios donde pierden el dinero y la salud familiar, tragando a escondidas su problema y deteriorando la convivencia.
Antes que el beber esta el deber.
Bebe agua a chorro y el vino a sorbos.
Beber aquí, beber allí, a la noche borrachín.
Cuando te convida el tabernero, te convida con tu dinero.
Dados, mujeres y vino: sacan al hombre del buen camino.
Donde entra el beber, sale el saber.
Un vasillo de vino, al segundo le abre camino..
Sus hijos no los respetan. El chico es hiperactivo, obstinado y tiene mal carácter y la niña exige mucha atención, tiene ataques de furia y hace continuamente maldades.
La disciplina no existe, el padre no participa y se esconde detrás del diario cuando está en casa y es un espectador.
Ambos han perdido el control, no están en sintonía y cada uno por su lado hace lo que puede dando mensajes contradictorios.
La niña de nueve años es la que manda y ninguno tiene límites. Las peleas con su hermano menor son violentas y ambos niños insultan y hasta les pegan a sus padres.
Cuando la niña la ataca, la madre reacciona pero luego se ríe como si fuera ella también una niña.
La madre se queja que su marido no participa pero cuando lo hace, a ella no le gusta y lo contradice delante de sus hijos. Por lo tanto él reconoce que ha adoptado la actitud de no intervenir y dejar que ella se ocupe de ellos.
Las escenas en el Supermercado son intolerables. Los niños cargan cada uno un carro con golosinas, abren los paquetes, comen el contenido y se dedican a hacer otras maldades, mientras la madre se mantiene alejada de ellos avergonzada de ese comportamiento y tratando que nadie se de cuenta que son sus hijos.
Estos niños no tienen modales, ni respetan a nadie, son groseros y mal educados.
Estos niños jamás reciben ningún castigo por lo que hacen y los padres no tienen la más mínima autoridad sobre ellos y hasta les temen.
Ante este cuadro, la situación se ha tornado tan insostenible que está a punto de malograr la estabilidad de la pareja.
Este modelo de familia no es una excepción sino algo casi habitual en los hogares de hoy en día; y este comportamiento se traslada a la escuela.
Es indispensable que los padres de una familia disfuncional, se unan como pareja para educar a sus hijos, sean coherentes e impongan una disciplina como padres y no como amigos.
Las madres temen que si son estrictas sus hijos no las quieran. Pero ocurre lo contrario, los hijos necesitan a sus padres cumpliendo su función de padres.
La primera medida es imponer las reglas y respetarse unos a otros.
Como segunda medida los padres son los que mandan.
Tercero, se establecerán horarios de Tv, estudio y ocio, ademas de las horas de cama.
Cuarto, los padres establecerán un sistema de premios y castigos que deberá cumplirse.
Todos los cambios que realicemos, cuestan trabajo a su adaptación y habituacion, pero si no se hacen y sobre todo si no se mantienen, de nada habrá servido todos los esfuerzos realizados para mejorar la situación.
Un político dijo recientemente: "la educación cuesta mucho, pero no educar cuesta mucho mas"