Saber con un alto porcentaje de fiabilidad si su hijo está tomando cualquier tipo de drogas cuesta 23 euros y está a su disposición en cualquier farmacia. En el mercado se pueden encontrar dos modalidades de estas pruebas, el 'Multidrog', que garantiza una detección cualitativa inmediata en orina y cuesta alrededor de 25 euros, y el 'Arifarm-Test' que detecta un menor abanico de sustancias, pero que se puede utilizar también con sudor, además de en orina, y cuesta unos 70 euros.
Simplemente se trata de un producto que cubre una necesidad. Está bien que los padres estén informados sobre la salud de sus hijos, y en caso de sospecha cuentan con un instrumento que pueda serles muy útil.
El consumo de estos tests es muy usual y no siempre su compra obedece a la decisión de unos padres preocupados por sus hijos. «La compra de este producto es a veces también el resultado de una petición por parte de los chavales a sus padres para intentar demostrarles su alejamiento del mundo de la droga y despejar las dudas que puedan tener sus padres al respecto, basadas en algunas ocasiones en elementos superficiales como las compañías.
El gran problema aparece si realizamos el test y descubrimos que nuestro hijo consume drogas. ¿Como actuamos después?¿Que le decimos?¿donde vamos?etc.
Dialogar de manera adecuada, para conocer: El tipo de sustancia consumida, la dosis y la frecuencia, el nivel de información que tiene el chico sobre ese consumo y esa droga y otras, grado de conciencia.
Valorar la situacion:
grado de riesgo/abuso, analizar los recursos existentes, Decidir que hacer, esta decisión se puede hacer con la ayuda de un profesional sobre esos temas( no con el cura, ni con un cuñado "porrero")
Esconder la cabeza y /o hacerse el que no sabe nada no suele mejorar la situación. Culpabilizar a otros tampoco suele ser una solución adecuada.
Innumerables son los padres que ocultan el problema por el "que dirán", y comienzan a peregrinar por sitios donde pierden el dinero y la salud familiar, tragando a escondidas su problema y deteriorando la convivencia.