Queremos compartir con vosotr@s una experiencia que a buen seguro también estáis experimentando desde el silencio.
Estaréis preguntándoos que es ser CODEPENDIENTE.

Me di cuenta de que era codependiente mucho tiempo después que supe que mi marido era alcohólico.
Nunca pude imaginar que mi exceso de cuidado, mi ocultación, mi sentimiento de culpabilidad y responsabilidad, mi miedo, mi tristeza, mi frustración, mi soledad… emociones que me paralizaban, que me bloqueaban, eran síntomas de mi enfermedad: la dependencia emocional.


Una enfermedad que me sorprendió cuando siempre imaginé que el único enfermo que había en casa era él

Yo me dí cuenta, de mi enfermedad, cuando después de que mi marido cocainómano decidiera ponerse en tratamiento de rehabilitación y yo acompañarle en su tratamiento como familiar, viera que durante mucho tiempo, yo había dejado de ser yo misma
Había estado ocultando su adición y había hecho que me creara un mundo paralelo a la vida real, donde yo sola sabía lo que ocurría en mi casa. Un mundo en le que solo había engaños, mentiras, miedos, tristezas, rabia, impotencia…. Emociones que me avergonzaban y las cuales me tenían paralizada durante mucho tiempo, fue entonces cuando entendí que no sólo él estaba enfermo, sino que inconscientemente y en silencio, yo había enfermado a su lado
(Marta).