- dudamos de nosotros mismos, o de otras personas cercanas, porque el adicto nos hace creer que otros son los culpables.
- discutimos con mucha facilidad, sin haber motivos claros.
- escondemos la cabeza en mas de una ocasión por lo que hizo el adicto, cuando salimos a la calle sentimos vergüenza por motivos del adicto.
- sacamos fuerzas cada día para solucionar las cosas, pero al día siguiente hay cosas nuevas a solucionar.
- perdemos el derecho a sentirnos mal, porque primero hay que ayudar al adicto.
- renunciamos a intereses propios en favor del adicto.
- padecemos las restricciones económicas ocasionadas por el.
El listado seria muy amplio, ¿verdad?.
Resumiendo: independientemente de lo que tome, eso genera problemas. Muchos tapan a sus hijos, maridos o amigos y no les llaman adictos. Porque decimos que no consumen tanto, o porque "fulanito" consume mas que el. Vemos que hay personas que niegan el problema de consumo, pero sin embargo padecen los problemas de las adicciones. Entonces lo siento pero VIVES CON UN ADICTO; TE GUSTE O NO.
El problema no es lo que tome, sino lo que hace.
El establecimiento de normas y su cumplimiento, contra el uso del alcohol y las drogas
Como padres, es nuestra responsabilidad establecer las normas que nuestros hijos han de seguir. Por lo que se refiere al uso del alcohol y de otras drogas, necesita establecer normas estrictas para proteger el bienestar de un hijo.
Sin embargo, el establecimiento de las normas sólo es la mitad de la tarea: debemos estar dispuestos a que se cumpla el castigo por el incumplimiento de las normas. Cuando establezca normas:
* Sea especifico. Explique la razón de cada norma. Dígales a sus hijos lo que son las normas y la conducta que se espera de ellos. Analice las consecuencias del incumplimiento de las normas: cuál será el castigo, cómo se realizará, durante cuánto tiempo y lo que se supone que se persigue con el castigo.
* Sea coherente. Debe quedar claro que la norma de no tomar alcohol ni drogas es la misma en todo momento y situación: en su casa, en la de un amigo, en cualquier lugar en donde se encuentre.
* Sea razonable. No agregue nuevas consecuencias de las que no había hablado antes del incumplimiento de las normas. Hay que evitar las amenazas poco realistas, como "tu padre te matará cuando llegue a casa". Lo que debe hacer es reaccionar con calma y hacer que se cumpla el castigo que el hijo espera recibir por haber incumplido la norma.
Fuente: A Parent's Guide to Prevention, U.S. Department of Education.