Analfabetismo emocional



La  cultura actual esta provocando un “analfabetismo emocional”, cada vez nos cuesta mas expresar las emociones y sentimientos.  Las personas con problemas de adicciones les cuesta superar sus miedos y situación, tras años de dolor y desesperanza,  la muerte se muestra cada vez con mas fuerza. El suicidio  no se elige; sucede cuando el dolor es mayor que los recursos para afrontarlo. El suicida siente un dolor emocional que se le hace insoportable, se siente desesperado,  piensa que nada cambiará en el futuro, que no puede contar con nadie que le dé su apoyo y no ve más salida a su sufrimiento que la muerte. Sin embargo, estas personas no quieren dejar de vivir; lo que verdaderamente quieren es dejar de sufrir, pero sus miedos y falta de recursos emocionales  les impide pensar en otras soluciones.
 
El número de suicidios es mayor que el de accidentes de tráfico. Cada día mueren en España 9 personas por esta causa. Cada historia es dolorosa y responde a un nombre con apellidos. 

Existe una vergüenza social a hablar sobre el tema, lo que provoca mas muerte. Ademas, a los familiares provoca mas dolor escondido. Esta vergüenza dificulta buscar soluciones, buscar ayuda, afrontar el dolor. La tradición religiosa establece como pecado el suicidio y hasta hace poco se negaba el campo santo a los suicidas. Estas ideas o prejuicios dificultan tratar el tema, tanto para la persona con problemas como para los familiares. 

La mejor prevención es la educación en valores, emociones y sentimientos. Nuestros hijos van al colegio con el último modelo de portátil, pero nadie les explica como construir su autoestima o adquirir empatía hacia sus semejantes. Sin duda es más fácil manejar un ordenador que aprender a manejar  nuestras emociones. Estos niños, analfabetos emocionales, educaran hijos que no sabrán enfrentarse emocionalmente a muchas situaciones.

Quizás hablar de suicidio sea para algunos extremo, pero las cifras deberian alertar cualquier sociedad desarrollada.